El Juzgado Federal N°1 de Paraná dictó el sobreseimiento de 43 productores rurales que habían sido imputados en el marco de la investigación por los incendios ocurridos en las islas del Delta del río Paraná durante la histórica sequía de 2020. Esta situación generó graves problemas de humo y cenizas que afectaron cotidianamente a localidades costeras como San Nicolás, Ramallo y San Pedro (Buenos Aires), así como Villa Constitución y Rosario (Santa Fe).
El juez federal Daniel Alonso determinó en su fallo la falta de pruebas suficientes para sostener la acusación contra los productores. No obstante, el fiscal de la causa, Claudio Kishimoto, adelantó que apelará la resolución judicial.
En su dictamen, el juez Alonso señaló que “la ausencia de pruebas vehementes genera una duda insuperable respecto de su vinculación con la situación constatada”, argumentando que continuar con el proceso penal sin elementos de convicción sólidos “sería más que prolongar la persecución penal sin razón suficiente”.
Los incendios investigados se desataron en un contexto de sequía histórica y una marcada bajante del río Paraná, impactando de manera significativa en la calidad del aire de ciudades ribereñas como San Nicolás, Rosario, San Pedro y Villa Constitución, que sufrieron la constante presencia de humo y cenizas provenientes de las quemas en las islas.
Ante esta situación, las municipalidades de Rosario y San Nicolás presentaron denuncias judiciales. En el caso de Rosario, se aportaron imágenes satelitales que identificaban focos de calor en áreas específicas, lo que derivó en la imputación de los 43 productores por presuntos incendios intencionales o, subsidiariamente, por negligencia en la administración de sus terrenos.
A pesar del sobreseimiento dictado por el juez Alonso, el fiscal Claudio Kishimoto manifestó públicamente su desacuerdo con la decisión. En declaraciones radiales, Kishimoto sostuvo que si bien la imputación por conducta dolosa podría ser discutible ante la falta de pruebas directas de que los productores iniciaran los fuegos, consideraba que "al menos la conducta negligente está acreditada".
El fiscal también señaló que en las declaraciones indagatorias, "la mayoría manifestaba que esas tierras eran heredadas y mostraban un cierto desinterés". Añadió que, si bien no se comprobó la responsabilidad penal directa de los imputados en el inicio de los incendios, se determinó que muchos de ellos, como dueños de las tierras afectadas, "no hicieron nada para custodiar la presencia de personas ajenas que hicieron los fuegos que ocasionaron los perjuicios ambientales y de salud".
Kishimoto enfatizó la importancia de la cuestión ambiental, remarcando que "esto es el medio ambiente: no importa que a vos no te afecte en tu propiedad, pero estás afectando la salud de mucha otra gente".
Cabe destacar que las imágenes satelitales y los informes científicos, incluyendo los elaborados por el Museo de Ciencias Naturales "Padre Antonio Scasso" de San Nicolás, evidenciaron el significativo impacto ambiental que los incendios provocaron en los humedales del Río Paraná.